lunes, 3 de diciembre de 2012

LA TRAVIESA

Para Lili Zar

Toda la piel trémula, pálida, expuesta
En rojo ardiente y negro incitante
Los pequeños pechos de niña
El túmulo del clítoris invitando
Los deseos de hembra burbujeando
Escondiendo al macho sensible
que busca rendirse como meretriz
ser poseído como loba en celo
como yegüita buscando y coleando
al potro que la penetre y la rompa.
Toda esa femineidad derramada
que espera ansiosa la loca copula
la verga que la posea hasta el dolor
las sexuales manos que la desnuden,
de pie, ofrecida, y esperando, esperando.