lunes, 21 de abril de 2008

TAL MARIPOSA


Para Ana Karen

El nombre de una mujer me delata.
Me duele una mujer en todo el cuerpo.
Jorge Luís Borges

Nunca fue tal mariposa oscura
en pubis tan intensa declarada
como en el vértice de tus piernas
y en el lecho sombra atardecida.
Selva perfumada su capullo oculta
pero nunca a los ojos del deseo
porque la delicia de tus muslos
esa suave persistencia de tu piel
es un sendero dulce e irrevocable
que lleva voluptuosa la mirada
atrapada en la filigrana sus alas.
Tibieza no ajena a los embrujos
de tu sutil y femenina esencia
ha de ser el roce o la caricia
que despierte tal leve mariposa.

miércoles, 9 de abril de 2008

DE TU BOCA


Para Karen Nohemi

En tu enigmática sonrisa de Gioconda
en el embrujo hipnótico de tus labios
en la cascada de tu pelo salvaje
en los hirientes puñales de tus ojos
en tu mirada de fiera indomable
esta la ardiente madona misteriosa
que urge en su casto escote las miradas,
y en el delicado esplendor de su piel
las huellas por el sendero de los deseos.
Sobre los dorados matices de ese encanto,
tu boca perfecta como un rojo sol atardecido
revela en su inquietante seducción inescrutable
hacia donde huyen y mueren todos los besos.

VIOLETA INMOVIL


Para Violeta Michele

Como una estatua de sal
que se diluye en mis sueños,
pura, transparente, intocable
como una pompa de jabón,
en tu soberbia desnudez
de diosa inmóvil anhelante
te despliegas por mis deseos
de hombre silencioso
de macho solitario
de amante ansioso.
Como una lejana esfinge,
de piel tibia que quema
me arrastras a tu cuerpo
me hieren tus pezones
me urgen tus nalgas
me encienden tus piernas
me buscan tus manos.
Y en ese alto abismo
de tu efigie impúdica
alcanzo a oler a la hembra
que ya rendido me atrapa.

martes, 1 de abril de 2008

CANTO DEL CAZADOR


Para Jeimy, triste

Mariposa silenciosa y triste
siempre enredada sin rendirse
en su vuelo de sueños femeninos,
bebiendo el néctar de la fantasía
para ir y venir revoloteando
entre esos ardientes momentos
donde unas pocas palabras nos bastaban
para escapar al jardín de los deseos.

Mariposa esquiva y deseada
caerás en mi red de íntimo cazador
y violare con mis labios y mi lengua
la suave iridiscencia de tus alas
hasta hacerte volver a nuestros sueños,
y me hundiré en tus senos de niña
ardiendo de ti por toda tu piel,
porque tenemos el fuego vivo
y la distancia lleva leña seca
para acortar el tiempo
en que caerás en mi tierna trampa.

Vuelve a mi jardín secreto
mariposa evasiva y triste
para que revivas alegre
con el néctar de mis ansias.

POSEEME EN TUS SOMBRAS


Para Jeimy, necesaria

Te declaro cerco de tinieblas, de sombras
de ausencia que abarca la noche
de manos vacías, de deseos tristes,
te declaro reina necesaria
te declaro princesa cruel
te declaro harpía de mis sueños
porque me faltas sediento de ti
y me quitas tu voz, tus palabras
tu imagen, que aplaca mis anhelos
y tu presencia que me salva
de mis naufragios y derrumbes.
Sábeme a tu lado, úntame
Poséeme, siénteme,
rómpeme en fragmentos,
destrúyeme en ti
pero no me faltes!

Porque así te quiero;
desnuda de piel y de alma
Abierta, rendida
Cobarde siempre de mí.

VIOLETA DESNUDA


Para Violeta Michele

Sentiré todo el contorno de tu cuerpo
dibujando su inquietante sinuosidad
con las sensibles yemas de mi dedos,
trazare el sendero del dulce placer
embebido de tu imaginado perfume,
construiré el mapa total de tu piel
desde los extensos valles profundos
hasta las delicadas y altas colinas,
cavaré surcos, elevare promontorios,
me hundiré en sus mares tibios
recorreré sus playas y marismas,
vagaré a ciegas, a puro tacto,
reptando por sus íntimos rincones
para conocer aquel origen misterioso
de tu intensa sensualidad subterránea.

VIOLETA VESTIDA


Para Violeta Michele

Ni en la plena conciencia de tu cuerpo
cubierto del negro noche sobre ti
ocultará el secreto viaje que mis ansias
harán en plena persecución y fuga,
siguiendo los restos del naufragio
que tu oleaje negro noche hizo de mí.
Soportaré el abismo humo de tus piernas,
la luna clara que se rompe en tu escote,
todas las navegaciones tristes y ajenas
que hicieron puerto en tus manos
o quedaron varadas en la rompiente
del canto de sirena de tus ojos.
Me dejaré perder perdido, esperando,
y para siempre a la gira de tus ojos.